El hombre del mostacho
(
23 de Julio de 2007)
Con ojos cerrados entró en un bar,
con largo mostacho se puso a mirar
a chicas pasando con grandes escotes,
en ellos su aliento quería dejar.
Tortilla comía sin poder degustar
pues su boca movía sólo para tragar;
el pan no cogía, lo quería dejar
y luego en la barra se puso a dormitar.
Ángel y demonio
(
5 de Septiembre de 2007)
Me sonríes tú con pícara intención
y me brumas con tu dulce buen mirar;
qué grande que puede ser tu corazón
y qué mala puedes ser, a mi pesar.
Tus dos ojos son tan rojos como el sol
y tu boca me recuerda el azafrán;
tus mejillas se sonrojan sin calor
y tu pelo con el viento va a volar.
Frágil cuerpo que es tan bello como un don,
bellas manos que son para acariciar;
yo deseo así besar cada rincón
de tu piel, un blanco azul como de mar.
Tu tez pálida que a mí me quema hoy,
tus dedos fuego que a mí han de quemar;
tus deseos arden siempre con pasión
y consumen lo que tú más vas a amar;
cambias siempre casi siempre sin razón,
eres ángel o demonio así sin más.
Para que fueras feliz
(
26 de Enero de 2008)
Para Nuria "Ilargi"
Para que fueras feliz por un día
un millón de mensajes te dejaría;
no hablarían de amor, sino de la vida,
pero seguro que leerlos te alegraría.
Para que, por un día, feliz tú fueras,
te acompañaría a ver la luna llena;
paseando los dos por una playa nueva,
caminando con los pies desnudos sobre la arena.
Para que, por un día, tú fueras feliz,
la noche anterior te acompañaría a dormir
y, aprovechando que bellos sueños tendrás,
en tu oído palabras bellas podría susurrar.
Y al día siguiente podrías descansar,
pues por ser vacaciones no tendrías que madrugar;
el desayuno prepararía y te lo llevaría:
un café con leche, una pasta y una chocolatina.
Para que feliz por un día tú pudieras ser
te invitaba a tomar algo al anochecer,
en una terracita muy cerquita del mar
donde bebieses con pajita e hicieras ruido al final.
El reencuentro
(
19 de Marzo de 2010)
Para mis ex-compañeros de E.G.B.
Noche oscura, noche lluviosa
y bajo un paraguas caminaba,
esperando llegar a la hora
al lugar donde me esperaban
para una cena maravillosa,
para un reencuentro de cuento de hadas.
Veinte años habían pasado
desde aquel último recreo;
mucho nuestras vidas cambiaron:
algún casado y algún soltero;
pero sobre todo disfrutamos
al contar buenos recuerdos.
Vinieron Fran, Eli y Jordina
y vino Sájer con buena memoria,
estaban risueñas Charito y Verónica
y Vanesa que, sin Ester, vino sola,
y con Estrella estaba también Mónica
que, desde Jaén vino y a todos emociona.
Entre plato y bebida brindamos
por tan maravilloso reencuentro,
entre todos las lágrimas soltamos
por tan gratos recuerdos
y también reímos hasta hartarnos
por haber pasado tan buenos momentos.
Ya al fin de la velada fuimos a bailar
a cualquier sitio que fuera bueno;
de dos bares nos tuvieron que echar
por ser tarde y faltar tiempo
y al final, a la hora de marchar,
no dijimos adiós sino hasta luego.
Un ángel, mi abuela
(
5 de Noviembre de 2011)
Un ángel acaba de subir
en esta noche de luna llena,
nadie ha sido más buena
que ella que nos deja aquí.
Fue una persona gentil
que dio a todos mucho amor,
por su familia mucho trabajó,
siempre tuvo muchas ganas de vivir.
Nos recibía con una sonrisa
cuando la íbamos a visitar
y aunque mucho no podíamos quedar
ese pequeño rato ella lo agradecía.
Fiel compañera tuvo ella
a Lulú, su tortuga querida
que siempre le hacía compañía,
a pesar de ser lenta y pequeña.
Y cada noche de luna llena
una estrella nueva brillará,
a todos nosotros siempre iluminará
porque será nuestra querida abuela.
... continúa ...
